Y aunque el tiempo nos convierta en nada. Quiero que sepas que apenas me despierto a mi cabeza le viene tu imagen, que hay días en que me estremezco solo al pensar en ti. Quiero que sepas que la primera vez que me besaste, algo dentro de mí me dijo que no sería la última vez. Quiero que sepas que cuando te veo dejo de creer en casi todo lo lógico, pues no hay lógica en que los minutos contigo se pasen volando. Debes saber que cada vez que te vas deseo que se me ocurra la excusa perfecta para que te quedes un rato más, pero las ideas siempre me abandonan. También espero que tengas una mínima idea de lo extremadamente mamona que me vuelvo cuando te tengo. Y de lo que es hablar de un dolor sin sentido, ese que queda cuando debo soltarte la mano. Y sé que me dolerá algún día, ese día te dedicaré palabras con sentido. Y quizás el tiempo nos haga dejar de mirarnos, y las palabras fluirán de mi boca a otros oídos, pasando por ti sin dejarte huella. Quizás pase todo eso, pero quiero que sepas que un día me desperté y pensé que si algo se le parecía a eso tan utópico, que es el amor, era esto. Debía ser esto. Quiero que sepas también que en una noche como la de hoy, olvidé el tiempo y sólo pensé en tu piel.
m.
No hay comentarios:
Publicar un comentario